
Enguera en el siglo XVIII, según Cavanilles
En las Efemérides de Enguera, de don Pedro Sucías, hay anotado en el 13 de marzo de 1794: “Viene a esta villa el sabio naturalista don Jose Antonio Cavanilles, hace una excursión por los montes de este término y escribe en su obra lo que era la villa en 1794”.

Dissapte literari, 1963
¡Qué lejos te vas quedando…! Se cantaba en aquellos años.
¡Y qué lejos nos hemos quedado nosotros!
El trabajo que hoy presentamos cumple, dentro de unos meses, las Bodas de Oro. El Documento nos parece importante, no siendo el menor elemento el de deshacer algún entuerto como por ejemplo que, en pleno franquismo, el régimen utilizara el valenciano en un acto en el Salón Columnario de La Lonja.

Fiesta Mayor en Enguera
Lo sentimos en el alma, pero no se ha podido resistir la tentación de traer este precioso relato de nuestro Dr. Albiñana sobre las Fiestas de San Miguel. La narración –tal como se recoge en el Documento– corresponde al capítulo V de Sol de Levante, que editara en Méjico el año 1922.
Con todo, para la Redacción, es un documento (todo el libro del que forma parte éste Documento) del buen hacer literario de don José María, que en diferentes ocasiones ha honrado nuestra biblioteca y varios de nuestros CD’s sobre los caminos.

Campiñera
Tal vez podemos decir que es el mejor canto al campiñero; tenemos otros: la marca de la Cooperativa, una calle en el casco nuevo de la población,… Tal vez por ello, porque es la narración explicativa del quehacer de tantos enguerinos que, a partir de la sentencia que desposeyó a un alcalde de su poltrona, cambiaron el nombre de Contra–Redonda por el de Campiñas.

El Guarda Menino
El Apunte de un sainete enguerino, que presentamos bajo el título de El Guarda Menino, original éste de Emilio Granero y Pepe Ciges, es un elemento más de los muchos fragmentos que fueron viendo la luz del que denominaran “SAINETE DE SANTA CRUZ” en la Revista Enguera.
Del Sainete de Santa Cruz fueron publicándose diversos episodios, si bien la versión completa, como apuntamos en diversas ocasiones, todavía no ha visto la luz, aunque el Grupo Artístico Enguera hizo un meritorio trabajo de recopilación y montaje.

El viaje de Madrit
La Revista Enguera del año 1962 publicó el texto que hoy recogemos en nuestra ciberBiblioteca.
El viaje a Madrit aparece como Apuntes para un sainete alizonenco en tres actos, pensamos que escrito por Pepe Ciges, toda vez que en él aparece como firma el siguiente texto: Por la transcripción J.C.P.
Para que vean, lean, disfruten y luego… nos explican cómo eran los güegos mejidicos

Visperas de danzas
Allá por el año de 1952 don José Ciges finalizaba lo que él denominó Visperas de danzas con el siguiente subtítulo: “Apunte para un sainete de costumbres enguerinas” y que fue recogido en el número especial de A Nuestros Jóvenes en la Sanmiguelá de 1952.
Con posterioridad, en el número de 1962 de la Revista Enguera, se reproducía con idéntico formato y el mismo dibujo de bailaores con atuendo valenciano, que es la versión que les presentamos.

Mi sobrino Tatín
¡Lo que se puede escribir desde El Curro, aunque sea en 1968!
Pues sí; don Miguel escribió este delicioso trabajo en plena canícula agosteña, supongo, añorando la media veda. Porque, coincidirán, nos es poco lo que relata: que si Tatín o Joaquín, que si cazar tordos con culo y catre, que si no estar para pastas, que si hay que saber jugar para que la bascollá sea definitiva… para terminar hablando de san Nicolás de Tolentino y del extraño comportamiento de las liebres en Kamchatka.
Y es que don Miguel era mucho ¡don Miguel!
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Ermita de Benali
En la foto adjunta podemos ver a Pepe Ciges, el año 1922, con 14 años.
En la revista A nuestros jóvenes del año 1947, coincidiendo con la festividad de San Antonio –patrón de los caseríos de Benali–, se publicó este precioso Romanze, que el autor, así lo expresa, dedica a su amigo de infancia Vicente Sarrión.
Mi amiga Esperancita
Los vuelos
Sintonía en blanco y azul: cielos, nubes y pájaros…
Saetas que raudas cruzan el cielo.
Alas de sereno batir. Ojos clavados en el horizonte. ¡Vuelan!
Suspendidos en el aire. ¡Vuelan!
Placer de sentirse sin sentir. ¡Volar!...
